La pandemia del covid-19 interrumpió las clases presenciales a partir del 16 de marzo de 2020. A partir de ese momento, los profesores de la Facultad de Ingeniería de la UNAM tuvieron que crear, a veces improvisar, formas de realizar sus clases a distancia evitando la pérdida del semestre.

Este coloquio tuvo como objetivo que un grupo de profesores compartieran sus experiencias obtenidas durante este proceso y apoyar de esta manera a otros profesores a mejorar sus esquemas en esta nueva situación que todo hace pensar será la nueva normalidad.

El Coloquio constó de tres sesiones, los días 23, 24 y 25 de junio de 2020.

Para la mejor consulta de la información y para transmitir de la mejor forma las experiencias de los profesores se recomienda revisar sus presentaciones y los videos disponibles.



Primera Sesión




Segunda Sesión




Tercera Sesión

Para la mejor consulta de la información y para transmitir de la mejor forma las experiencias de los profesores se recomienda revisar sus presentaciones y los videos disponibles.

23 de junio de 2020

  • Luis Javier Acosta Bernal
  • José Alberto Ramírea Aguilar
  • Elizabeth Fonseca Chávez
  • Antonio Sánchez Pérez
  • Maricarmen Navarrete Sevilla
  • Amanda Lolita Pineda Norman
  • Alejandra Vargas Espinoza de los Monteros

24 de junio de 2020

  • Alejandro Rodríguez Valdés
  • María Jaquelina López Barrientos
  • Luis Yair Bautista Blanco
  • Yoloxóchitl Morales Martínez
  • Teheny Carolina Ruiz Primo
  • Nikte Norma Ocampo Guerrero
  • Evelyn Salazar Guerrero
  • Alfonso Salazar Guerrero
  • Rodolfo Solís Ubaldo

25 de junio de 2020

  • Eduardo Espinosa Ávila
  • Guadalupe Durán Rojas
  • Pablo Juárez Montoya
  • Juan Velázquez Torres
  • Rafael Viñas Rodríguez
  • Bruno Armando López Jiménez
  • Salvador Centeno Estrada
  • Mario Alfredo Ibarra Carrillo
  • Yahvé Abdul Ledezma Rubio

23 de junio de 2020

Luis Javier Acosta Bernal

Establece sus experiencias positivas y negativas en temas como logística del curso, humanitaria, psicológico, tecnológico, habilidades, formación docente, aspectos sociales y evaluación.

Considera un balance positivo ya que le permitió crecer como profesor y cumplir con su labor con el apoyo de sus alumnos y vislumbra áreas de oportunidad para romper paradigmas en la enseñanza de la ingeniería.

José Alberto Ramírez Aguilar

Es un hecho que no se tenía experiencia para impartir de manera emergente y masiva las clases por motivo de la pandemia. Poco a poco hubo respuesta de las universidades.

Se observa la necesidad de capacitación técnica-pedagógica dirigido por especialistas y que contemple todas las consecuencias que esta situación genere y que en su implementación participen los académicos en equipo.

Elizabeth Fonseca Chávez

Un curso en línea no necesariamente cumple con las expectativas de los alumnos y los profesores, implica el desarrollo de habilidades para ambos. En su diseño debe tenerse claro el objetivo y contemplar lo que significa su aplicación.

Presenta su metodología para desarrollar un curso en línea y las reacciones de sus alumnos al término del semestre. Concluye que algunas autoridades, profesores y alumnos estaban poco dispuestos a impartir clase antes de la pandemia.

Antonio Sánchez Pérez

Maricarmen Navarrete Sevilla

Continuamos aprendiendo a aprender. Resultó un cambio importante dejar la socialización personal por otra en línea en donde es muy difícil conocer la reacción de la persona con la que se interactúa.

Representó un gran esfuerzo lograr un sentimiento de relativa comodidad en el desarrollo de la clase. Diseñó estrategias considerando la participación de los alumnos; el cambio fue drástico. La respuesta de sus alumnos fue estupenda y se siente agradecida por ello.

Amanda Lolita Pineda Norman

Mostró los recursos utilizados en su clase, incluso antes de la contingencia. Estableció contacto con sus alumnos y logró continuar con el semestre impartiendo la clase y respondiendo las dudas y atendiendo a sus alumnos.

Puso a disposición de sus alumnos, en todo momento, los contenidos de los cursos lo que les permitió seguir delante de acuerdo con sus necesidades.

Le resultó complicado, en medio de esta situación, separar la vida profesional de la personal, pero esto se puede mejorar con mejor organización.

Alejandra Vargas Espinoza de los Monteros

Aplicó su experiencia aprendiendo de la situación, particularmente en los resultados de la aplicación de un análisis FODA. Tuvo una respuesta madura y comprometida de sus alumnos, aún de aquellos que no estaba acostumbrados a esta forma de trabajo.

Detectó oportunidades de mejora en la transformación del trabajo del profesor y de los alumnos. Hay oportunidades de compartir recursos entre los profesores y de orientar a los alumnos a que se hagan dueños de su aprendizaje y para transformar la actividad docente de la Facultad.

24 de junio de 2020

Alejandro Rodríguez Valdés

Detalla como instrumentó la comunicación entre alumnos y profesor en tiempos de pandemia, l cual es facilitada por las herramientas tecnológicas, las cuales describe detalladamente haciendo notar cómo son usadas por los alumnos y que ventajas aporta.

María Jaquelina López Barrientos

El inicio de la contingencia fue impactante, con sensaciones por sus estudiantes, por elegir las mejores herramientas para seguir adelante. Mantuvo el contacto con sus alumnos y seleccionó los recursos que consideró adecuados. A la brevedad se organizó con sus grupos y continuó con su trabajo.

Resalta la respuesta de todos sus estudiantes ya que continuaron con interés y responsabilidad. Hubo satisfacción entre todos por haber logrado el desarrollo de la clase

Luis Yair Bautista Blanco

Detalla la implementación de un entorno virtual que compartió con sus alumnos y la forma en que desarrolló su curso a través de él. Al prolongarse la pandemia desarrolló un salón virtual con base en este entorno lo que permitió reproducir las condiciones del salón de clase.

El aprendizaje estuvo en reconocer lo vital que son los recursos de cómputo e internet, hay nuevas reglas de etiqueta, hay una siguiente realidad implementada con un mayor alcance.

Yoloxóchitl Morales Martínez

Presenta un detallado análisis de la metodología que siguió en el desarrollo de las clases que impartió, a partir de las opiniones de sus alumnos en la consideración de los recursos tecnológicos y aquellos de los que disponían sus estudiantes.

Yoloxóchitl Morales Martínez

Teheny Carolina Ruiz Primo

Literatura como refugio. A lo largo de diez años que llevo dando clases en la Facultad, poco a poco se ha ido revelando la relevancia que tiene para los estudiantes las clases de humanidades en general, y las de literatura en particular.

Los comentarios en mis encuestas y los ensayos finales reflejan un profundo agradecimiento por encontrar un espacio abierto para la reflexión, y también un refugio del mundo. No es mérito propio; la literatura ha sido desde siempre un resguardo para los humanos: para los que escriben, para los que leen, para los que escuchan.

La literatura ha sido también el gran espejo en el que las generaciones pasadas, presentes y futuras conviven y ven reflejadas sus inquietudes, sus necesidades, sus dolores y temores, pero también sus logros, alegrías y anhelos.

La literatura nos hermana. A través de ella descubrimos una comunidad invisible con todos los que han participado del acuerdo del escritor y el lector. A través de la lectura en voz alta además nos tejemos con los demás que escuchan y reflexionan en tiempo real lo mismo que nosotros escuchamos y reflexionamos. A través de ese vínculo entonces podemos abordar la otredad como una ramificación de nuestro propio pensamiento y sentimiento; la soledad se disipa, el encuentro profundamente humano puede ocurrir porque la literatura no es otra cosa que el reflejo de las verdades humanas que trascienden lugares, tiempos y circunstancias.

Cuando comenzó la cuarentena me pregunté si debía ajustar los textos previamente elegidos para poder darle a mis estudiantes algo que les ayudad para sobrellevar lo que se veía venir. En una sola clase me tomé la libertad de leer La máscara de la muerte roja de Edgar Alan Poe y algunos otros textos referentes a pandemias que no estaban en el temario. De ahí en fuera, mantuve el temario sin cambios confiando que las verdades profundamente humanas que entraña cada texto saldrían a alumbrar este momento peculiar de la historia humana.

Así fue. Mis estudiantes preguntaron en más de una ocasión si los textos que estábamos leyendo los leía cada semestre y se sorprendían ante mi afirmación. Pudieron verse reflejados en cada texto como si hubiera sido escrito para este momento particular.

De nuevo, el mérito no es mío, era sólo la literatura haciendo su magia.

Sin embargo, aunque me encantaría decir que la literatura hace su efecto en mí, sin mí y a pesar de mí, las estadísticas de lectura de nuestro país y de nuestra Facultad en particular apuntan lo contrario. Algo estamos haciendo mal como planificadores de cursos literarios y como profesores de literatura en los niveles básicos para que la experiencia gozosa de la literatura no llegue a nuestros niños, a nuestros jóvenes y a nuestra sociedad entera.

Aunque me parece que el tema es importante, y las respuestas a esta pregunta podrían ser fundamentales para cambiar las estadísticas, el día de hoy sólo puedo intentar esbozar qué aspectos de mi propia aproximación han permitido que este disfrute, que claramente no lo hago yo, ocurra exitosamente en un grupo con el que, además, este semestre, no estuve frente a frente.

La virtualidad nos enfrentó a retos peculiares]; sin embargo, paradójicamente, esa misma circunstancia fue la que creó que los estudiantes estuvieran más ávidos y necesitados de vivir la experiencia literaria.

Exiliados de su salón, alejados de sus amigos, de sus parejas, imposibilitados de la vinculación humana para sobrevivir, el espacio virtual de un aula de ZOOM pudo darles, una vez por semana, una experiencia tan entrañable que aún en días feriados me pidieron si pudiera hacer tiempo para leerles un cuento y aún terminando el semestre están buscando seguir teniendo los encuentros literarios.

Durante las cuatro horas que duraba mi clase, a través de una pantalla, las dificultados de toda la humanidad en esta pandemia se hacían presentes; los estudiantes que no tenían buen internet, los que tomaban clase mientras ayudaban a sus padres en alguna labor, los que lloraban preocupados por un familiar enfermo, los que cuidaban a sus hermanos menores, los que tuvieron que empezar a trabajar por problemas económicos en sus familias, los que se enfermaron por coronavirus y también, mi propia realidad de tener un niño pequeño, que no podía pasar ocho horas que yo doy clases en casa sin tener mi atención.

La última sección en que los estudiantes tuvieron la oportunidad de compartir sus propios textos sobre sus vivencias de esta pandemia fue particularmente emotiva. Hubo lágrimas y risas y una profunda sensación de comunidad humana.

Pero ¿qué es lo relevante de esta experiencia? El encuentro mismo. Lo literario es lo humano y como humanos las necesidades que compartimos son similares. La necesidad de la presencia plena del otro, esa presencia voluntaria, placentera y dispuesta a estar ahí; la docencia es un ejercicio de estar plenamente para nuestros estudiantes, ser íntegramente nosotros en ese momento, la necesidad de escucha atenta y sin juicio, saber que lo que decimos es relevante para los demás, que nuestras ideas aportan algo a nuestra comunidad, que lo que somos como personas, lo que vivimos como individuos y lo que sentimos constituyen puentes para los demás.

La necesidad de comunicación no violenta que nos permita desplegarnos en libertad sin miedo a ser reprimidos, ridiculizados o vulnerados. Y concretamente, a la edad de nuestros estudiantes, la necesidad de modelos de referencia adultos que sean congruentes con su verdad, que les permita vislumbrar el futuro de forma armónica con sus ideales, que los inviten a reflexionar sobre los ideales humanos y a vivir en concordancia con ellos.

Estas necesidades pedagógicas de esbozos son, por supuesto, utópicas. Los docentes somos humanos en medio de esta crisis humana y lo hacemos lo mejor que podemos con las herramientas que tenemos. Pero me parece que es la búsqueda de estas utopías la que nos acerca a ese encuentro pedagógico que nuestros estudiantes añoran y me parece que es precisamente en estos tiempos de emergencia y virtualidad el que practicarlas nos permita ser la diferencia individual y colectiva que como universitarios buscamos ser en el mundo.

Me despido con alguna frase de mis estudiantes de este semestre que atesoro: este semestre encontré en la clase de literatura mucho más que un salón de clase, encontré una familia.

Nikte Norma Ocampo Guerrero

Una crisis en idioma chino es la combinación de dos conceptos: amenaza o peligro mortal y oportunidad única. Una crisis mal manejada sí puede ser un peligro, pero siempre es una oportunidad.

Le resultó complicado contender con el desaliento, la incertidumbre y la nueva forma de trabajo pero con la colaboración de sus alumnos salieron adelante.

Evelyn Salazar Guerrero

Detalla cómo fue su transición a las clases a distancia con herramientas al principio desconocidas. Todo salió bien hasta que le fue hackeada una sesión de ZOOM, lo que fue muy frustrante y con sentimientos encontrados; sin embargo, fueron los propios alumnos quienes le apoyaron dado que el ataque fue externo.

El trabajo siguió adelante. Tanto alumnos como profesores deben conocer las herramientas y siempre tener una alternativa en caso de falla. Se debe crear un ambiente donde predomine la ética y los valores, ser flexible en horarios y tiempos de entrega sin demeritar la calidad de los trabajos y ser claro en las instrucciones.

Alfonso Salazar Guerrero

Su método de trabajo fue complementado por herramientas tecnológicas y de manera organizada continuó con su trabajo a distancia. A partir de una experiencia previa, optó por una forma que no priorizaba la presencia simultánea de los alumnos con el objetivo de mantener al mayor número de ellos en activo y evitar su deserción.

Fue afortunado el contacto personal por encima del grupal para mantener a los alumnos en el curso ya que esto les permite a ellos contender con las circunstancias en las que afrontan la situación.

Rodolfo Solís Ubaldo

En su experiencia académica nunca se había enfrentado a una situación tan angustiante como la actual. La inquietud fue cómo reproducir, en lo posible, el ambiente escolarizado a través de las diferentes plataformas.

Considera que la respuesta a sus esfuerzos por parte de los alumnos fue buena ya que sólo se dieron de baja aquellos que nunca llegaron a su grupo.

Esta situación emergente debe aportar algo positivo, quizás será crear un nuevo concepto de aula alejado del tradicional.

25 de junio de 2020

Guadalupe Durán Rojas

Tanto los alumnos como ella misma desarrollaron con responsabilidad habilidades y actitudes como autoconocimiento, la autoestima y con ello logró una alta asistencia en los cursos en línea.

El cambio de la educación presencial a virtual es una experiencia retadora que la pandemia aceleró. Propone compartir experiencias y desarrollar habilidades como la resiliencia, el liderazgo y la comunicación y evitar en la medida de lo posible malas prácticas como la apatía y la irresponsabilidad. Recomienda ampliamente consultar la Red de Innovación Educativa en www.rie360.mx entro otras (consultar la presentación).

Eduardo Espinosa Ávila

Detalla el proceso que súbitamente tuvo que establecer con sus alumnos, la elección de las herramientas de comunicación, de programación, la plataforma educativa, entre otras. Gracias a ello, no perdió ninguna sesión.

La mayor dificultad radicó en la comunicación, es complicado evitar los ruidos ambientales, acostumbrarse a las nuevas maneras de contactarse. Aprovechó las habilidades informáticas de los alumnos.

Logró la permanencia de la mayoría de sus alumnos y concluyó con éxito sus cursos.

Pablo Juárez Montoya

A nivel mundial, la situación originada por el COVID-19 ha rebasado a las instituciones; en corto tiempo ha sido necesario manejar y en cierta forma dominar una serie de herramientas para seguir adelante con la impartición de las clases. Hacerse de los equipos, adecuar el lugar de trabajo, trabajar desde casa son dificultades que hay que superar.

La respuesta de sus alumnos fue diversa en función de su situación familiar y económica. No obstante, la experiencia del trabajo en línea ha sido interesante pero no sencillo, pero con la práctica se ha convertido en especialista. Con base en su experiencia, recomienda ser cuidadoso con los aspectos personales y con la seguridad en los sistemas informáticos.

Esta situación abre nuevos panoramas y nuevos retos.

Juan Velázquez Torres

“Érase una vez un profesor que no sabía nada de nuevas tecnologías, pero se animó a vivir una aventura” Surgieron muchas preguntas ante tanta incertidumbre y confusión. Su espíritu de superación personal le permitió dar los primeros pasos en un curso súper intensivo y personal.

Pudo comprobar, a través de unas estadísticas básicas, de la buena respuesta de sus alumnos. Programas, sitios, bibliotecas digitales son recursos invaluables. Google classroom fue la herramienta fundamental.

Todas sus experiencias son positivas porque contribuyeron a su desarrollo profesional. Tuvo un sentimiento de desigualdad social y económica generado por la educación a distancia, contrario al principio de igualdad que rige a la UNAM.

Rafael Viñas Rodríguez

El uso de nuevas tecnologías es un avance, pero también implica alguna sensación de temor. Destaca el compromiso de sus alumnos con un alto porcentaje de asistencia.

Recomienda tener lineamientos institucionales para el desarrollo de las clases en línea. Comenta que no quedó satisfecho con las evaluaciones que aplicó dado que detectó algunas malas prácticas.

Recomienda concientizar a los alumnos sobre el orgullo que significa pertenecer a la UNAM.

Bruno Armando López Jiménez

Describe los recursos tecnológicos utilizados. Resalta las dificultades que está a su alcance resolver y otras que no lo están. Sobre los primeros destacan el cansancio, las evaluaciones y la falta de experiencia en el manejo del grupo.

Por otra parte, en las clases a distancia no hay pérdida de tiempo por desplazamientos gracias las herramientas tecnológicas y otras ventajas de los pizarrones electrónicos.

Esta etapa de transición representa una curva de aprendizaje ascendente y es una oportunidad para el desarrollo de programas de educación a distancia.

Salvador Centeno Estrada

Quédate en casa y estudia conmigo. Destaca su pertenencia a la comunidad “Youtube educación México” encargada de subir a la plataforma contenidos educativo, de video clases y divulgación científica para interactuar por medio de redes sociales: www.edutubers.net

Por medio de esta comunidad desarrolló sus clases en un horario fijo por una hora interactuando con los alumnos. Con estas clases se elaboró una lista de reproducción estando los contenidos disponibles a cualquier hora.

Con base en una plataforma y la interacción con sus alumnos por medio de las redes sociales desarrolló un plan de trabajo. Coordinó la publicación de videos con las tareas entregables y retroalimentó a sus alumnos, lo cual le dio gran éxito.

Mario Alfredo Ibarra Carrillo

Hace una revisión de la infraestructura y los recursos que tuvo que instrumentar para soportar sus clases adicionalmente a las herramientas disponibles y describe la forma en que puso sus materiales a disposición de los alumnos.

Yahvé Abdul Ledezma Rubio

El amor por la docencia en los tiempos del COVID-19.. Una clase en línea no es la extrapolación de las clases presenciales: ¿las formas tradicionales de trabajo aplican en estas circunstancias? Hay que crear una nueva forma de entablar comunicación efectiva con los alumnos y fomentar la reflexión y el razonamiento.

Logró en buena medida trasladar la mayoría de los elementos de la clase presencial a la clase en línea, con excepción de observar su lenguaje corporal de los alumnos.

El reto del profesor es trabajar como modelo para el alumno, impartir una clase de excelencia, mantener la puntualidad y considerar las problemáticas entorno a los alumnos.

Se cambiaron las formas de aproximación y no se debe demeritar el rigor de las clases.

Sin importar la forma en que se realice la educación, lo importante es adquirir nuevos conocimientos y habilidades por medio de la comunicación.